Haz contacto visual con tu niño, aleja la vista y luego míralo de nuevo y sonríe. ¿Sonríe? Después, míralo, cierra tus ojos y ábrelos de nuevo, haz una cara de sorpresa. Cambia la velocidad de lo que haces y diviértete conectándote con tu niño.
Vea lo que aprende su hijo
Hacer contacto visual es una parte importante de aprender a prestar atención e interactuar con los demás. Si tu niño responde cuando haces una cara, puedes reaccionar a su respuesta. Cuando haces esto, lo ayudas a aprender a interactuar en las conversaciones y en sus relaciones con los demás.
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